viernes, 9 de octubre de 2015

La música sonaba en tu habitación.


 

Lo cierto es que siempre me había preguntado por los secretos que se escondían tras aquella puerta azul. 

Azul como tus ojos, azul como esa flor que un día te regale, azul. 

Y susurrabas una canción, me esforzaba por oírte tanto como tú intentabas no molestar. Oír tu voz me hacía soñar en un día que por fin te dieras cuenta que estaba allí. Mientras tanto intentaba cruzarme contigo y sonreírte en aquel pasillo de la residencia. 

Cuando recuerdo aquellos años siento una vida oscura y al fondo una única luz, la que irradiabas tu. 

Y día tras día soñando en que me vieras al pasar junto a ti, que levantaras aquellos hermosos ojos que conocía tan bien y me miraras, que descubrieras esa sonrisa que solo existía por y para ti, aquella vida que no entendía sin ti a mi lado. Pero nunca ocurrió. 

Han pasado tantos años…. 

A veces imagino como serás ahora, aquel pelo rubio, aquellos ojos azules, aquella mirada que me esquivo siempre, y sobre todo tu voz, aquella maravillosa voz.





 

No hay comentarios:

Publicar un comentario