jueves, 2 de julio de 2015

El verano es época de cambios.



No sé si es por la temperatura o por la cercanía del sol nuestra mente se altera. 

Lo que ayer era imprescindible hoy carece de importancia.

A veces pienso en cómo era yo hace un par de décadas y me comparo con esta persona que soy ahora. Soy completamente distinto y no sabría decir si mejor o peor, es más creo que esto no tiene ninguna importancia en este momento.

Conozco muchas personas que añoran volver atrás diez, veinte o más años. Yo lo pienso y diría que no. He pasado durante esta vida momentos maravillosos y crueles, sorpresas  y sustos, todo esos momentos han conformado la persona que soy ahora. ¿Qué seria yo sin ellos?

No sería nada.

Y estoy tan seguro porque analizo las personas que tengo alrededor, veo amor, veo rigor, dejadez, todas las características imaginables y a veces me pregunto cómo me verán a mí los demás, esas personas con las que convivo día a día.

Es época de cambios, lo noto en mí…. 







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