Todas las miradas confluían en ella. Nada más entrar en el salón lo noto.
Aquel día no se había visto especialmente bella y el vestido que llevaba era
muy normal.
Pero según avanzaba se notaba más y más incómoda, pensó incluso en que había
sido un grave error asistir a aquella reunión.
Todo había comenzado unos días antes, Luisa estaba tranquilamente en casa
cuando el teléfono sonó.
-Buenos días- escucho
-Hola- respondio
A partir de aquí una larga conversación que quedo en una despedida un poco traumática
para ella, Era casi imposible hacer callar a la operadora y tuvo que colgar. A
ella, metódica, suave, educada, le había costado
mucho tomar esa decisión, incluso sabía que durante un rato se sentiría mal,
pero no pudo evitarlo.
Allí se quedó, parada delante del teléfono, molesta y sin saber qué hacer.
Un minuto más tarde salió a la calle, y allí junto a su patio lo encontró. Era
un magnifico animal, incluso guapo pensó, y casi no sintió nada, de un bocado
sus dedos desaparecieron.
Maldita llamada pensó, mientras la llevaban al hospital.
Maldita
Surrealista
ResponderEliminar